Verde para decorar.

Los verdes más suaves (Gleeful SW 6709, Impetuous SW 6916) se llevan de maravillas con los tonos pastel, los neutros, los rosas pálidos y los dorados. Si en su composición hay una generosa cantidad de amarillo, aumentará la sensación de calidez y luminosidad por lo cual son opciones ideales para ambientes pequeños u oscuros.

Por su parte los verdes más cítricos (Electric Lime SW 6921, Center Stage SW 6920) combinan muy bien con los amarillos, los ocres o los marrones. Son ideales para zonas alegres, cálidas y llenas de vitalidad, por lo cual son perfectos para ambientes infantiles y juveniles.  Asimismo son un buen contraste para los espacios rústicos. Recomendamos mesurar su uso en ambientes con mucha iluminación ya que pueden generar deslumbramiento.

Por último, los verdes más opacos (Evergreens SW 6447, Isle of Pines SW 6461) denotan sobriedad y elegancia. Pueden ser combinados con tonalidades intensas sólo si se cuenta con buena luz. De lo contrario sugerimos combinarlos con blancos para evitar oscurecer o empequeñecer los ambientes.

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